Es 4 de julio, y Hank y Frannie celebran sus cinco años de vida en común. Ella, más apasionada, le regala dos billetes para Bora Bora. Él, mucho más práctico, la escritura de la casa donde viven, y ella se decepciona. La mejor escena viene cuando empiezan a discutir en la cocina y empiezan a hacerse reproches. Ella le dice que no es su príncipe azul. Seguramente aceptó en su momento que él era simplemente un buen hombre, y está desencantada. Él le contesta dolido: ¡Y tú qué! Al principio te pasabas la vida depilándote las piernas, y ahora pasan semanas. A lo que ella replica: ¡Mírate tú! Te has ido dejando, y ahora te pareces cada vez más a un cerdo...Todo esto sucede en la película Corazonada de Francis Ford Coppola.
Esta escena se irá repitiendo en muchas parejas que han dejado de quererse o simplemente se aburren juntos.
Siempre he pensado que antes de llegar al momento en que puedan recriminarte tu dejadez en la depilación, o echarle en cara a tu pareja su mal estado físico, lo mejor es coger a puerta y ¡aire!
Ahora hace seis años que vivo una relación bastante idílica. Convivo con un ser que nunca me dirá si pincho, más que nada porque él también me pincha cuando me roza. Estamos en empate técnico. Paseamos en silencio, comemos en silencio, dormimos en silencio. Así no hay manera de discutir
En el instituto, mi amiga la bruja tenía una profesora de francés y durante las clases lo único que conseguían de ella era que les explicara su particular teoría sobre los inconvenientes del matrimonio. Decía: Lo único que consigues cuando estás casada, es oír como tu marido se tira un sonoro pedo cuando va caminando por el pasillo. Durante aquel curso aprendieron poco francés pero oyeron frases memorables de aquella entrañable profe que, a punto de llegar a la jubilación, seguía soltera.
Yo conviví durante años con un tipo muy divertido. Cuando se encerraba en el lavabo, a mí me gustaba llamar a la puerta para importunarle en su faena:
-Pom, pom.(Yo)
-¿Quién es? (Él)
-¡Soy yo!
-¿Qué vienes a buscar?
-¡A tí!
Repetíamos la escena cada vez que yo conseguía pillarle en el lavabo. Éramos el duo Pimpinela. Ha sido y es, una de las relaciones más estables y divertidas que he tenido.
Y es que pienso que no hay que dejar nunca de lado el sentido del humor. Sin diversión todo se reduce a cero. Hasta en las discusiones más furibundas se ha de procurar acabar con una broma. No hay nada más desagradable que despertar y recordar que ayer discutiste y a ver, ¿cómo te enfrentas a la nueva situación que se creó a partir de una tontería? Ya lo dijo algún sabio consejero matrimonial: Antes de acostaros, procurad hacer la paces...
Esta escena se irá repitiendo en muchas parejas que han dejado de quererse o simplemente se aburren juntos.
Siempre he pensado que antes de llegar al momento en que puedan recriminarte tu dejadez en la depilación, o echarle en cara a tu pareja su mal estado físico, lo mejor es coger a puerta y ¡aire!
Ahora hace seis años que vivo una relación bastante idílica. Convivo con un ser que nunca me dirá si pincho, más que nada porque él también me pincha cuando me roza. Estamos en empate técnico. Paseamos en silencio, comemos en silencio, dormimos en silencio. Así no hay manera de discutir
En el instituto, mi amiga la bruja tenía una profesora de francés y durante las clases lo único que conseguían de ella era que les explicara su particular teoría sobre los inconvenientes del matrimonio. Decía: Lo único que consigues cuando estás casada, es oír como tu marido se tira un sonoro pedo cuando va caminando por el pasillo. Durante aquel curso aprendieron poco francés pero oyeron frases memorables de aquella entrañable profe que, a punto de llegar a la jubilación, seguía soltera.
Yo conviví durante años con un tipo muy divertido. Cuando se encerraba en el lavabo, a mí me gustaba llamar a la puerta para importunarle en su faena:
-Pom, pom.(Yo)
-¿Quién es? (Él)
-¡Soy yo!
-¿Qué vienes a buscar?
-¡A tí!
Repetíamos la escena cada vez que yo conseguía pillarle en el lavabo. Éramos el duo Pimpinela. Ha sido y es, una de las relaciones más estables y divertidas que he tenido.
Y es que pienso que no hay que dejar nunca de lado el sentido del humor. Sin diversión todo se reduce a cero. Hasta en las discusiones más furibundas se ha de procurar acabar con una broma. No hay nada más desagradable que despertar y recordar que ayer discutiste y a ver, ¿cómo te enfrentas a la nueva situación que se creó a partir de una tontería? Ya lo dijo algún sabio consejero matrimonial: Antes de acostaros, procurad hacer la paces...
Conozco una relación que dura desde 1969. Para mí es una de las más perfectas. Son Epi Y blas.
Me encanta ver cómo un Epi juguetón importuna a Blas, cuando éste lo único que desea es leer el periódico tranquilamente sentadito en su sillón orejero. Epi se acerca por detrás a Blas con: ¡Tú la tienes! Esperando a que Blas se levante de su asiento y correteen por la casa persiguéndose como locos.
Epi y Blas comparten habitación. Cada uno en su camita, fundamental según Marcel.lí Virgili para que una relación resulte duradera. A Epi le gusta comer galletas en la cama cosa que Blas aborrece. Pero Epi seguirá comiendo sus galletas en la cama, más que nada porque él es el eterno niño que nunca deberíamos dejar de ser. Ahora circulan por ahí unos rumores difamatorios sobre su relación. Prefiero ignorarlos y dejar que Epi y Blas sigan siendo la pareja ideal.
En la película La extraña pareja , Jack Lemmon Y Walter Matthau conviven un corto espacio de tiempo en el espacioso apartamento de Matthau. Al personaje que interpreta Lemmon, su mujer acaba de abandonarle y Walter Matthau le acoge temporalmente en su casa cuando el abandonado quiere suicidarse. Pronto se arrepentirá de su decisión, cuando Lemmon adopta el papel de mujer de la casa. Ordena, limpia, lava la ropa y cocina. Y lo que en un principio iba a ser una eterna fiesta de solterones, acaba convirtiéndose en una pesadilla para Matthau y sus colegas en la partida de póker que juegan los viernes lejos de sus mujeres.
Conclusión: ¿Existe la pareja perfecta? Mi teoría para conseguirlo consiste en:
Quererse como Hank y Frannie. Abstenerse de reproches. Que haya momentos de silencio como los de Emily y Bruc. Perdonar las posibles ventosidades del otro y tomárselo a risa. Ser a ratos pimpinelas. Que la mujer no actúe siempre como una mujer y el hombre como un hombre, para no acabar como esa extraña pareja. Y siempre, siempre, ser como Epi, eternos niños con ganas de jugar al ¡tú la tienes!
Me encanta ver cómo un Epi juguetón importuna a Blas, cuando éste lo único que desea es leer el periódico tranquilamente sentadito en su sillón orejero. Epi se acerca por detrás a Blas con: ¡Tú la tienes! Esperando a que Blas se levante de su asiento y correteen por la casa persiguéndose como locos.
Epi y Blas comparten habitación. Cada uno en su camita, fundamental según Marcel.lí Virgili para que una relación resulte duradera. A Epi le gusta comer galletas en la cama cosa que Blas aborrece. Pero Epi seguirá comiendo sus galletas en la cama, más que nada porque él es el eterno niño que nunca deberíamos dejar de ser. Ahora circulan por ahí unos rumores difamatorios sobre su relación. Prefiero ignorarlos y dejar que Epi y Blas sigan siendo la pareja ideal.
En la película La extraña pareja , Jack Lemmon Y Walter Matthau conviven un corto espacio de tiempo en el espacioso apartamento de Matthau. Al personaje que interpreta Lemmon, su mujer acaba de abandonarle y Walter Matthau le acoge temporalmente en su casa cuando el abandonado quiere suicidarse. Pronto se arrepentirá de su decisión, cuando Lemmon adopta el papel de mujer de la casa. Ordena, limpia, lava la ropa y cocina. Y lo que en un principio iba a ser una eterna fiesta de solterones, acaba convirtiéndose en una pesadilla para Matthau y sus colegas en la partida de póker que juegan los viernes lejos de sus mujeres.
Conclusión: ¿Existe la pareja perfecta? Mi teoría para conseguirlo consiste en:
Quererse como Hank y Frannie. Abstenerse de reproches. Que haya momentos de silencio como los de Emily y Bruc. Perdonar las posibles ventosidades del otro y tomárselo a risa. Ser a ratos pimpinelas. Que la mujer no actúe siempre como una mujer y el hombre como un hombre, para no acabar como esa extraña pareja. Y siempre, siempre, ser como Epi, eternos niños con ganas de jugar al ¡tú la tienes!
15 comentarios:
Deu ser difícil, no? ;-)
GRANDES RELASIONES:
esteso - pajares
tip - coll
epi - blas
el duo sacapuntas
el duo dinamico
gracita morales - j.l. vázquez
tito - piraña (ver ano azul)
goma espuma
mortadelo - filemon
batman - robin
el gordo y el flaco
Tom Y Jerry
tiñoso - canijo (erase una vez el hombre)
naranjito - citronio
cruz y raya
las virtudes
la dama y el vagabundo
martes y trece
(dedicado a chanquete y al duque de feria, los mejores amigos de los niños)
Anónimo,te has dejado a Tintín y Milú. Pero para mí la relación más extraña ha sido la de Pimpinela.
I la Sara mago ;-)
Rita, gamberreta, dona-li ales a l'anónimo i no pararà! Fa anys va formar el grup pimpinela amb mi, quina creu! ;)
Te ha quedado un post muy divertido. Pero no te equivoques: la vida es seriedad, sentido del deber, responsabilidades, pasar por el altar, aguantar ventosidades del colega, criar esos niños malcriados, pasarlas canutas... Y tú eres muy, muy Epi. Demasiado Epi. Por eso me gustas :-)
PD: a quién le decías eso del pom-pom, quién es? Si me lo hacieras a mí... Em treuria l'espardenya. El lavabo és sagrat, coi.
I tant que riure's és el més important de tot. Fins i tot en els moments més deseperats intentar posar-li sentit de l'humor. M'ha agradat el post. Haurem de provar si funciona la teva "recepta"...
Ui, Paseante com ho pintes...passo
Prefereixo ser una Epi eternament.
No seràs tu com Blas, oi? No ho penso dir quí era l'altre pimpinela, ni que em torturis.
Et treuries l'espardenya? Quina por!
Aleta, les meves teories són això: teoria. M'agrada que tinguis wifi! Et trobava a faltar.
Provaré això de Pimpinela al WC jeje. Tot serà que em treguin l'espardenya... La veritat és que el bon humor ajuda. No es tracta de ser frívols, però tampoc es pot ser superseriós perquè t'amargues i amargues
Khalina, en tinc més d'anèctotes de wc, però ja seria massa posar-les, jeje. Prova-ho, és divertit, però la brometa de copyright ;)
També sóc seriosa qua toca, eh?
Igual deberías escribir un libro sobre convivencia en el matrimonio, jaja!!
yo como vivo soltero tengo bastante con aguantarme a mi mismo, aunque me suelo hacer bromas y chistes y me hablo frente al espejo...sintomas de locura y sindrome de Peter pan supongo, bueno creo que es preparación para posibles convivencias matrimoniales ;-)
Sin duda el sentido del humor en la pareja es fundamental y también la sinceridad, digo yo, que no soy experto eh!!
Atikus, pues mira que yo...Aun no hablo sola, eh? jeje.
Seguramente acabaré como la profe de francés, teorizando...Respecto al libro no sería mala idea, pero solo conozco solteros que me podrían ayuda en el tema, título:
Convivencia matrimonial escrita por solteros.
En tot tipus de relació és fonamental la complicitat, el sentit de l'humor i contemplar el que s'esdevingui a certa distància...
Són quatre dies!! Millor no amargar-se la vida ni amargar la de l'altre. Que hi ha complicitat? endavant. Que no hi ha quimica? millor deixar-ho.
El bon humor ajuda a relativitzar, i passar-s'ho bé és fonamental.
A mi sempre m'ha agradat fer l'Epi. Feia temps tenia el meu Epi una mica abandonat però des d'aquest estiu, amb una nova relació, he tingut la oportunitat de retrobar-lo.
Zipi i Zape també entrarien a la llista No? I Don Quijote i Sancho Panza?
Petons
Sumpta, sense complicitat diria que és impossibles mantenir qualsevol tipus de relació....
Fra Miquel, està bé axò de fer sortir l'Epi que duies dins teu. Felicitats per aquesta nova alegria!
Zipi i Zape i sobretot els pares, una parella ben especial també...
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