sábado, 21 de julio de 2007

CENDRILLON


Hay días en que una es Cenicienta y le llega una invitación del príncipe Wynton y decide dejar a un lado los harapos y vestirse de princesa, y es entonces cuando me esmero y me visto con mi falda japonesa que los ratoncitos me ayudaron a coser de noche, luzco escote y dejo a la vista mis hombros rectos y recién coloreados por el sol, peino mis cabellos lisos y calzo zapatos de tacón, asegurándolos bien en los tobillos por si debo bajar precipitadamente las escaleras del castillo antes de que den las doce.

La calabaza es ahora un mercedes que me recoge y empiezan las llamadas, la primer de mi amiga la bruja, se ha enterado de una actuación y me pregunta si quiero acompañarla, y le respondo entre risas, que me espera una noche de jazz...en Peñíscola.

Cuando llegamos a tierras valencianas, que hace tiempo que no pisamos, vemos que don ladrillo ha hecho de las suyas, y ya no reconocemos el lugar, todo ha cambiado demasiado.

Como siempre llegamos con tiempo de sobra, buscamos la estancia en donde sirven copas y disfrutamos de la terraza en una noche especialmente fresca, el buen tiempo ha abandonado momentáneamente la costanera.

Entretanto, comentamos los últimos acontecimientos de la semana y recordamos, cuando aún no se había apoderado de nosotros la pereza, las noches que pasamos en este lugar en busca de diversión, en compañía de unos amigos que aparecen de repente en la fiesta, han dejado en casa a sus mujeres y se han escapado para ver al príncipe Wynton, piensan que una ocasión así tardará años en volver a suceder.

Somos afortunados y tenemos tres butacas en primera fila, una voz de mujer nos anuncia que la actuación va a dar comienzo, salen los músicos a escena, ocupan sus respectivos lugares, y es entonces cuando el príncipe blande su trompeta y camina hacia nosotros, nos separan dos metros escasos y observa largamente al público y su mirada se fija en nosotros tres, un instante que se me hace eterno y es que esta noche estamos especialmente atractivos...mi cuñado luego lo comenta y nos dice: he estado a punto de señalarnos y decir, es a nosotros?

Suenan ya las primeras notas y como no acostumbro a desconectar del todo en los conciertos me dedico a observar a los músicos, una mezcla de blancos y negros, pero son los negros los verdaderamente bellos, los verdaderos príncipes y me pregunto cuándo dejamos que nuestra piel se tornara blanca y por qué dejamos escapar nuestra alma negra..pero hay hombres que solo cambiaron de piel y conservaron su alma y ellos fueron los permitidos para unirse a la banda.

Suena Big Train, y la música es tan intensa que de repente estamos en el sur y subimos a un tren de mercancías, vamos descalzos y vestimos harapos, pero no nos preocupa, pues vamos a recorrer el país de sur a norte en busca de una oportunidad...Big, Big, Train.

Pero las notas dejan de sonar y volvemos de golpe a nuestro sitio, ya nunca recorreremos las hermosas tierras del sur y retornamos a nuestro norte particular.

De regreso me doy cuenta de que conservo los zapatos, quizás no debí atarlos tan fuerte, y dejarlos en el camino y volver descalza a casa como Cenicienta y me doy cuenta que al sacarme las ropas de princesa, mi piel es ahora negra y entre lágrimas veo que aún conservo mi alma, y que vuelve a ser negra como las cenizas que me esperaran mañana para que las recoja.

11 comentarios:

alatrencada dijo...

Que fàcil és perdre una sandàlia estiuenca... llàstima que a vegades qui la troba no és precisament un príncep.

Emily dijo...

Crec que trobaràs el teu príncep, ni que sigui un trist mortal, i t'arregli l'aleta que tens trencada fa massa temps...alatrencada...

Sumpta dijo...

Quina adaptació més bonica d'aquest clàssic...

Emily dijo...

Sense tu no ho haguès fet, ets la germana de Cendrillon, però en aquets cas molt bona amb mi.

Patricia dijo...

Es que esa música la hace sentir a una como una princesa Emily, de los últimos clásicos es de lo poco que queda, ¿sabías que es trompeta en orquesta sinfónica también? pásame tu correo que te envío unas fotos del Lou bien graciosas.

el paseante dijo...

Et poses maca, t'arregles, et pentines... i després somnies amb vagabundejar en trens cap al sud. Aisss, dones. Quina nit més bonica vas tenir. (I no esborris aquest blog coi.)

Emily dijo...

Belle he visto las fotos y formais un trío perfecto, felicidades.
Paseante es que realment no tinc res de princesa, sóc una rodamón.

MK dijo...

Rodamon , princesa , bruixa ...i tots els personatges de l´auca si fa falta. I que hi hagi mes nits com aquesta per intrepretar-los. Una abraçada ben forta desde l´illa!!.

Emily dijo...

Gràcies, MK, i a veure quina de les dues es posa més moreneta, al setembre medirem la morenor!

MK dijo...

Emily , he rebut el teu missatge al gmail , pero no em deixa enviar-te resposta i el intro no va...I he perdut dos correus que estava enviant...es que aquí les coses van una mica a manivel-la. Una abraçada forta.
Jo m´he d´amagar del sol perqué a finals d´estiu estic com un escarabat...

MK dijo...

Un record i una abraçada. Ja he fet fotos de troncs blancs.Segueixo per aquí perduda . Fins aviat.

 
Free counter and web stats